IZAMIENTO DE EQUINOS
De allí en adelante sólo se encontró montañas y espesuras, nublados y fuertes lluvias, tambi&eoacute;n tempestades muy fuertes. Ante tales dificultades Candia hizo junta de capitanes para decidir si avanzaban o retrocedían, determinándose todos por lo primero en vista que víveres no faltaban. Continuaron así hasta un monte que era peña viva con un marco de arboledas y bejucos, lo que equivalía a no poder seguir en los caballos. La solución fue que " cortando de aquellos largos Bejucos hicieron con ellos largas maromas, i llevándolas Mancebos ligeros, i robustos, que subieron a la Peña, las ataron a los Arboles, i después a los Cuerpos de los Caballos, i con increíble trabajo los subían ". Así vencieron " esta jamás vista dificultad", elevando por los aires, cual Pegasos, a los equinos de la expedición.
LA SALIDA AL COLLAO
Candia desentendió todo esto y avanzó durante algunos días más, no ganando diariamente más de una legua, pero surgieron plantas con durísimas espinas que se clavaban en las piernas y en los pies, y esto convirtió a las huestes en un pequeño ejército de cojos. Hubo por añadidura ríos que cruzar, ciénagas que vencer y pedregales muy dificultosos. Los ríos pasaron improvisando puentes de troncos, las ciénagas cegándolas con entrelazados de lianas, y pedregales de la manera que cada uno pudo. En esto hizo su aparición el hambre y los soldados comenzaron a comerse los caballos que morían. Candia recién pareció percatarse del peligro y hasta llego a pensar que había ido demasiado lejos en su obstinación irresponsable. Hizo una junta de sus capitanes y les expuso la situación, todos decidieron volver, por lo que se acordó el regreso por la ruta del Collao.
Tras marchas que en dureza dejaron poco que desear frente a las anteriores, los expedicionarios terminaron saliendo a unos pueblos de indios que resultaron ser de Alonso de Mesa y Lucas Martínez Vegaso, Vecinos del Cusco. Salieron sin haber conseguido otra cosa que penurias, por lo que la expedición de Ambaya se convirtió en sinónimo del más sonado fracaso. Cronológicamente debemos de ubicarla en la primera mitad del año 1538. fue notable sin embargo, por que a lo largo de toda ella no perdió la vida un solo hombre.
LA ENTRADA DE LOS CHUNCHOS
PERANZUREZ: Peranzúrez de Camporredondo, natural de Sahagún, fue el capitán que guió la todavía más desgraciada jornada de los Chunchos. Ocurrió que llegó a Hernando Pizarro la noticia que en la hueste de Pedro de Candia se gestaba un motín que, entre otras cosas, pretendía liberar al preso Adelantado Almagro: Miguel de Mesa, canario y loro de casta, era el señalado como cabecilla. Con ánimo de castigar este desmán partió Hernando Pizarro del Cusco, alcanzó a Candia que acababa de salir de Ambaya, lo expresó a él y le mató al capitán de sus artilleros, luego reunió a todos los soldados y les dio por capitán a Peranzúrez que hasta allí lo había acompañado. Le adjudicó entonces la entrada de los Chunchos con titulo de Capitán General (junio de 1538).
SAMA:
Al frente de sus expedicionarios Peranzúrez avanzó hasta Carabaya, donde descansó dos meses, partiendo después a descubrir la tierra de Sama. Seguidamente se le juntó Juan de Quijada, quien también tenía en esta ocasión el cargo de Maese de Campo, el cual le alcanzó un número regular de caballos. Con trescientos españoles y ocho mil cargueros indios penetro entonces por montes extremadamente ásperos. La gente –contra todo lo ocurrido en Ambaya- se empezó a morir. Apareció en eso un río caudaloso y todos se aprestaron a construir balsas para cruzarlo, las mismas que se lanzaron al agua sin novedad, pero estando transportando a los soldados, aparecieron los indios en la otra orilla disparando sus flechas e hiriendo a muchos. Peranzúres repelió la agresión y puso en fuga a los nativos, pero un Hernado Gallego murió día y medio después, cundiendo el terror entre todos al murmurarse que las flechas eran envenenadas.
Asentado ya en la otra orilla, Peranzúres penetró el país con treinta hombres de a caballo, llegando a una tierra donde se daba solamente yuca. El soldado Juan Alonso Palomino se adelantó con once jinetes, pero halló la tierra más pobre todavía, siendo su mejor informe que veinticinco jornadas adelante existía un río gigantesco. Vueltos todos al campamento Peranzúres decidió salir a los Mojos y Chuquiabo.
Los relatos que los soldados de Peranzúres hicieron a su vuelta de los chunchos, llamaron la atención y la codicia de varios otros capitanes ávidos de gloria y de riqueza las noticias de los descubrimientos de minas, que estaban haciendo los Pizarro en Charcas, especialmente en el famoso Potosi. Excitaron a muchos más a ir por esas regiones y con tal motivo, las llanuras de nuestra meseta se vieron frecuentadas por el paso de los conquistadores. pues hasta el mismo Francisco Pizarro. en 1539. vino por Ayaviri, Pucará, Coata, hasta Chucuito. el actual distrito, que entonces era floreciente ciudad de indios. la principal sobre el lago llamado entonces de Chucuito y también la principal de toda la altiplanicie.
EL FAMOSO HERNANDO GIRON: Descontento con el presidente Gasca fue comisionado para esa expedición en 1549. y cuando Gasca ya salio del Cuzco, varios españoles prófugos de resultas de sus compromisos con Gonzalo Pizarro, se retiraron a la montaña donde estaba Hernández Girón y formaron con él ese mismo año en 1549. una población en el lavadero de oro llamado San Juan del Oro de la provincia de Carabaya.
Dispuesto a realizar la empresa volvió Girón al Cuzco, ingresando a la ciudad el Jueves Santo y pregonando su entrada y tambor el Domingo de Cuasimodo. Entre otras cosas se voceó entonces que el caudillo tenia facultad para fundar tres ciudades y que todos los que quisieran ser vecinos encomenderos tendrían cabida en ella.
Esta población de San Juan del Oro llegó a tener un brillo extraordinario por la gran cantidad de gentes españolas que acudían a ella llevando hatos humanos de indios para sacar oro de los lavaderos, "que lo consiguieron fácilmente". Tuvo pretensiones la creciente ciudad de ser capital de Audiencia, separándose de la del Cuzco, debido a su apogeo y a su actividad. Pero las posteriores incursiones de las tribus salvajes de las montaña, hicieron que poco a poco la abandonasen y por último dejasen del todo, hasta desaparecer completamente, pues no quedaban ni vestigios de sus construcciones, de las cuales eran notables dos iglesias muy bien construidas y descritas por un autor anónimo, en un mapa del Collao.
En todas estas incursiones los españoles contaban con el forzado auxilio de esclavos negros e indígenas de Centro América como: "Guatemalas", "Nicaraguas", "Sandias", es así que en esta incursión Hernando Girón, trajo unos guías de las tribus de Sandia, (Nuevo Mexico al sur de Estados Unidos), que lo acompañaron y perecieron en la fragosas refriegas contra los naturales para la conquista del Ambaya, habiéndose establecido en la zona mas templada y más adecuada para la permanencia de su gente, decide ponerle el nombre de Sandia en memoria de sus guías.
Por Luis Santillana Carpio
La Leyenda de Santia dice lo siguiente:
Pachacamac, Dios del universo creador de la tierra, así como los tres reinos de la naturaleza mezclando el sihuayro, la coca, y el llapu le dio un soplo y creo al hombre al que llamó Huiracocha.
Este se encargó de sembrar vida, recorriendo toda la tierra, pero sus horas de descanso era de tristeza y melancolía. Pachacamac acudió en su ayuda, tomando un poco de tierra, la amazo y luego le dio el soplo de vida. Esta mujer fue llamada Cullahua, personificando a la Madre Tierra o Pachamama, símbolo de la mujer americana.
Esta pareja se estableció en el corazón de la tierra o Chitapampa, cumplida su misión, Huiracocha fue llamado por su padre Pachacamac, su cuerpo fue convertido en piedra su espíritu se entrego al sol
Cullahua vivió mucho tiempo mós, hasta que sus hijos crecieron y se multiplicaron. Al morir se reencarno con la luna y así fue la eterna compañera del sol
Dejaron 4 hijos Saantia, Saancahua, Saancaru y Saancatu, quienes se distribuyeron por los 4 lares, Saantia prefirió quedarse en Chitapampa, pero un día fue raptada por Chayanaco de la tierra de los Chaya o gente de la selva.
Al ser rechazado por Saantia, contrato los servicios del grupo Usicayos, quien logro a ser dormir a Saantia y así en este estado fue llevada hasta una bella quebrada de la cabecera de la selva al despertar, quiso huir pero al fin se quedo en el lugar, pero nunca más acepto los amores de Chayanaco.
Chayanaco despechado, y herido, en una noche de tormenta bajo gritando de las cumbres con intención de matar a Saantia, siendo salvada por Huayanaco, hermano de Chayanaco; este hecho genero la gratitud de Saantia surgiendo entre ellos un profundo amor. Conocedor de esto Chayanaco busco vengar la ofrenda de su hermano, se encontraron en medio de cerro entablando una feroz lucha en un minuto rodaron ambos al abismo de donde jamás volvieron a salir.
Saantia quedo sola, con su hijo Phuyutarqui, nacido del rapto de Chayanaco e Inca Anco fruto de los gratos amores con Huayanaco, este último se dedico a practicar el bien y sus descendientes se llamaron Allanquepas. Se dice que en las noches de soledad de Saantia cuando las fuertes lluvias y tormentas eléctricas caen sobre estos parajes, se siente la lucha entre Huayanaco y Chayanaco, atormentando a Saantia hasta su muerte.
Se dice que en el lugar donde vivió Saantia se levanta la Ciudad, que con orgullo perennizó su nombre.
Provincia de Sandia y Carabaya
Por Ley del 5 de Febrero de 1875 cuando se encontraba como presidente constitucional de la república Manuel Pardo y Lavalle, dividió la provincia de Carabaya y creó la de Sandia, esta misma Ley señaló al pueblo de Sandia como capital provincial,
Art. 2do La prov. de Carabaya esta constituida por 9 distritos.
Macusani, Corani, Ollachea, Coasa, Ayapata, Usicayos, Ituata, Ajollani y Crucero.
Siendo su capital Macusani.
Art. 3ro La prov. de Sandia constituida por siete distritos:
Phara, Patambuco, Sandia, Cuyocuyo, Sina, Quiaca, y Poto
Por ley del 28 de Octubre de 1889 se elevó al pueblo de Sandia a la categoría de ciudad.
Según el libro demarcación política del ejercito de 15 de Mayo de 1925 indica como distrito de Sandia y como su creación "época de la independencia" .
Los siguientes distritos fueron creados por:
Sina, Poto y Cuyocuyo, creada por Decreto del 2 de mayo de 1854,
Phara, Patambuco y Quiaca creados por Ley del 2 de Enero de 1857
Limbani creado por Ley No 956 del 28 de diciembre de 1908,
San Juan de Oro por Ley No 12415 del 7 noviembre de 1955,
Yanahuaya por Ley No 14062 del 23 de abril de 1962